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El plantel del Ciclón realiza trabajos físicos. (05/06/2013)

 

Cerro trabajó este martes bajo el mando del preparador físico Francisco Núñez.

 

Los trabajos fueron netamente físicos, al igual que lo será este miércoles, y el jueves, pues el siguiente compromiso será recién el próximo martes.  

 

Cerro Porteño cuenta con ocho convocados a ambas selecciones que se preparan para sus respectivas competencias. Adentrado en el Mundial, la Albirroja Sub 20 se prepara con cinco representantes azulgranas, Junior Alonso, Jorge Balbuena, Jorge Rojas, Teodoro Paredes y Miguel Almirón.

 

Por su parte, la Selección de mayores enfrenta este viernes a Chile, por las Eliminatorias, y Gerardo Pelusso llamó a Fidencio Oviedo, Julio Dos santos y Jonathan Fabbro, quienes trabajan en el Carde de Ypané. Por ello, Francisco Arce tiene vía libre para promocionar a otros juveniles y lo hará con el defensor central Cristian Ramón Enciso Barreto, de 22 años, que viene jugando en la División Reserva.

 

Otro llamado es el lateral volante Claudio Estigarribia, hermano del jugador de la Sampdoria Marcelo Estigarribia, pues Néstor Ramírez fue sancionado con tres partidos por su expulsión en el superclásico.

 

Estigarribia señaló que se siente "bastante bien" con el nuevo llamado, esta vez con otro cuerpo técnico. "Uno siempre viene trabajando para ser tenido en cuenta y esto me pone muy contento", señaló el jugador.

 

Pero el problema principal para el Chiqui es la zona defensiva, donde últimamente venía jugando con una línea de tres, con Luis Cardozo, Víctor Hugo Mareco y Junior Alonso.

 

 Teodoro Paredes era la principal alternativa, pero también está convocado, por lo que las opciones de Arce son escasas pues César Benítez sufrió una refractura y Williams Martínez se recupera en Uruguay de su rotura de ligamento. De esta manera, el único disponible es Gonzalo Viera.

 

Y alo había dicho el presidente, el Dr. Zapag días atrás, que en Cerro hay varios jugadores con capacidad y talento, pero muchos no tienen la oportunidad de mostrarse. Y esa oportunidad sí la tendrá el juvenil nacido 12 de mayo de 1991, en Pilar, departamento de Ñeembucú. Cristian Enciso, de 1,84 metros de altura, podrá ser visto y sólo depende de su capacidad para quedar en Primera y, por qué no, robarse algún lugar en la zaga del Ciclón.

 

Él mismo se define como un central "de buena velocidad, un buen juego aéreo muy pegajoso en la marca". "Desde los 15 años estoy en Cerro", cuenta el zaguero que tuvo una pasantía de ocho meses por Brasil, en el Gremio de Porto Alegre, y también pidieron por él en su ciudad: el General Díaz de Pilar quiso llevarlo a préstamo y el año pasado defendió sus colores antes de volver a Cerro, donde hoy tiene la oportunidad luego de haber superado una fractura de tibia y peroné en el pie derecho.

 

Lo pasado, pisado, asegura. "Hace tiempo que estaba esperando esto, es una oportunidad única en mi carrera", cuenta emocionado el defensor pilarense luego de que Arce le diera el ok para entrenarse en Cerro pensando en Luqueño, rival del martes.

 

Enciso contó que Arce y su asistente Blas Cristaldo le dijeron que esté "mentalizado a full con el trabajo de la semana y con la oportunidad que me están dando".

 

Y el jugador dijo que ante el interés del cuerpo técnico, la dirigencia de Cerro Porteño ya le hizo firmar su contrato profesional. Su familia y ciudad, orgullosas, afirma. "Ayer firmé mi contrato y me dijeron que me presente para la práctica de la semana.

 

Me preguntaron cómo estaba físicamente, y les dije que de lo mejor. Me dijeron que me prepare, que en cualquier momento iba a tener mi chance", dijo con orgullo.

 

Como caracteriza a los jugadores de las inferiores de Cerro, uno de los requisitos en el club de parte de los entrenadores y la propia hinchada es saber qué camiseta tienen puesta. Y Cristian aseguró ser fanático cerrista y que la casaca azulgrana se siente en la sangre. 

 

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