En el clásico de mañana, Cerro Porteño no podrá contar con el santafesino Alcides Píccoli y se apresta a cubrirlo el rosarino Miguel Angel Torrén. Para esta mañana quedó el repaso táctico, pero el técnico Pedro Troglio ratificó ayer que Avalos y Campodónico comandarán el ataque.

 

El Ciclón tiene marcado para mañana un nuevo clásico ante Olimpia, el cual se perderá el defensor Alcides Píccoli, víctima de una rotura de menisco en la rodilla izquierda, según se comprobó con la resonancia por la que pasó anteayer.

Píccoli no solo se pierde el tradicional duelo ante los de Para Uno, sino difícilmente vuelva a jugar los partidos de la primera rueda del torneo Clausura. Puesto que la etapa de recuperación es por lo menos un mes y luego comenzar a intensificar.

En principio, en la “pizarra” de Troglio estaba Rodrigo Burgos para sustituirlo. Y cuando se retiraba ayer del club, un poco después del mediodía dijo que si llegaba el pase del zaguero rosarino Miguel Angel Torrén, este iba a jugar junto a Nelson Cabrera en la defensa. La ficha enviada por AFA llegó a las oficinas de la APF a las 15:30 y en el entrenamiento táctico marcado para esta mañana, a puertas cerradas, Torrén ya será alistado en el once azulgrana.

Entonces, además del estreno de Torrén, que viene a préstamo de Newell’s, está la vuelta de Lorenzo Silva tras estar ausente en el encuentro de la fecha pasada ante su ex club. Asimismo, el DT confirmó en la víspera que Mariano Campodónico será el acompañante de Erwin Avalos en el ataque del Ciclón.

LOS CAMBIOS Y EL EQUIPO

Los que ceden sus puestos son Píccoli, Luis Cáceres y Maximiliano Estévez. Y el once que se ensayará hoy es con Roberto Fernández; Luis Cardozo, Miguel Angel Torrén, Nelson Cabrera y David Mendoza; Julio Irrazábal, Javier Villarreal, Jorge Brítez y Lorenzo Silva; Erwin Avalos y Mariano Campodónico.

 

Erwin Lorenzo Ávalos.

 

Su principal característica es hacerle goles a los franjeados. Se alejó del club de sus amores al finalizar el campeonato del 2006. Fue transferido a Toluca de México, donde no llegó a sobresalir. Luego recaló en Racing de Avellaneda. Tuvo ofertas de varios clubes locales, Libertad, Guaraní y Nacional, pero se decidió por volver a su casa, Cerro Porteño.

“Todo me salió muy bien en mi retorno. Esperé por mi habilitación, llegó antes del partido con Tacuary, el profesor Pedro Troglio me llamó para jugar el segundo tiempo y pude anotar el gol del triunfo. Una inmensa felicidad, porque ayudé al equipo a lograr la primera victoria”, explicó el goleador del Ciclón.

Sobre cómo le fue en los cotejos frente a los franjeados, fue tajante: “Siempre estuve bien, espero que esta vez me vaya mejor. Los dos últimos partidos ante este rival marqué los goles de la victoria (2006). Para mí es una gran felicidad ganarle a Olimpia y más si puedo hacerle un gol. Formamos un gran equipo, nos vino bien vencer a Tacuary, porque llegamos al partido con una moral muy elevada. La meta trazada es llegar al cetro y todo depende de lo que hagamos de ahora en más”, dijo.

Hay una gran afinidad entre el delantero y la hinchada cerrista. Eso aumentó considerablemente el miércoles pasado con el tanto ante Tacuary. “Desde las inferiores juego en Cerro Porteño. Es mi familia. Estuve un poco alejado, pero volví. Tenemos una hinchada maravillosa que nos apoya en todo momento. Los que entraremos en este partido nos mentalizaremos que los tres puntos deben ser nuestros para ir con todo en busca del título”, finalizó Erwin Ávalos.