Cerro derrotó por 3 a 1 a su tradicional rival Olimpia en un partido ampliamente dominado por el "Ciclón", pero su victoria no el alcanzó para seguir con la posibilidad de obtener el titulo del Torneo Clausura.
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Walter Fretes festeja con sus compañeros uno de los goles. |
Cerro dominó las acciones del partido y a los 18 minutos del primer tiempo pasó al frente en el marcador con el gol de Walter Fretes, que remató el balón con potencia tras el pase retrasado del "Teto" Cristaldo.
Apenas iniciado el segundo tiempo Lorgio Álvarez convirtió el segundo colocando el balón por encima del arquero Bordad, y a los 6 minutos volvió a marcar Walter Fretes para el Ciclón.
A los 28 Roberto el "Gatito" Fernández detuvo el penal rematado por Édison Giménez, quien a los 42 del segundo tiempo convirtió el descuento para el "Decano".
Cerro logró un justo triunfo pero no le alcanzó para seguir peleando el campeonato. Libertad igualó cero a cero con Guaraní y con el punto rescatado en "Dos Bocas" mas los puntos que los árbitros le dieron, se consagró campeón a una fecha del final del Clausura.
DETALLES DEL PARTIDO
Cerro Porteño: Roberto Fernández, Osvaldo Hobecker, Fidel Pérez, Nelson Cabrera, Jorge Núñez, Walter Fretes, Rodrigo Burgos, Jorge Britez, Ernesto Cristaldo, Jorge Achucarro, Pablo Giménez. DT: Javier Torrente.
Olimpia: Leonardo Bordad, Gilberto Velázquez, Darío Caballero, Carlos Gamarra, Óscar Gimenez, Roberto Bonet, David Villalba, Osmar Molinas, Diego Ciz, Roberto Acuña, Juvenal Cardozo. DT: Carlos Jara Saguier.
Árbitro: Carlos Galeano., Líneas: César Franco y Néstor Valiente.
Estadio: Defensores del Chaco.
¿Como nació la rivalidad entre cerristas y olimpistas?
Si bien el clásico de esta tarde es uno de los de menor relevancia en muchos años, uno llega con nulas y el otro con exiguas posibilidades de ser campeón, Olimpia y Cerro Porteño, respectivamente.
Sin embargo la rivalidad instalada en la segunda década del siglo XX entre los clubes más ganadores del fútbol paraguayo no se limita únicamente a la importancia de los puntos en juego.
Va mucho más allá, está en juego el orgullo de vencer al tradicional rival, un placer que muchas veces vale tanto como un campeonato.
La historia nos cuenta que la rivalidad comenzó así: Cerro Porteño se fundó el 1 de Octubre de 1912, en un momento en el que el campeón vigente del fútbol paraguayo era el Olimpia.
El azulgrana nació con pretensiones de representar a las barriadas populares a diferencia de otros clubes fundados años antes por integrantes de las llamadas élites sociales, entre ellos el Olimpia.
En 1913 la Liga Paraguaya de Fútbol cambió sus Estatutos Sociales e incluyó la disposición que debían ser 5 los clubes que participen anualmente del campeonato oficial, a diferencia de los 4 que jugaron el año anterior. Por lo tanto, organizó un torneo preliminar y clasificatorio del cual tomaron parte 4 equipos, Cerro Porteño, el 10 de Agosto de San Lorenzo, El Porvenir de Ypacaraí y River Plate. El torneo lo ganó el equipo azulgrana y ganó el derecho de participar del campeonato de 1913 juntamente con Olimpia, Sol de América, Nacional y Guaraní.
Ese torneo lo ganó Cerro Porteño y último quedó el hasta entonces campeón vigente, Olimpia, fue el primer golpe de rivalidad entre los simpatizantes de uno y otro club con los primeros cruces de palabras y tentadas como se decía entonces.
Al año siguiente la situación cambió, habiéndose sumado un club más (6) al torneo (River Plate), Cerro Porteño hizo la misma campaña y Olimpia revirtió su mala actuación del año anterior y al término del campeonato de 1914 terminaron primeros los dos clubes con 15 puntos, por lo que tuvieron que jugar partidos de desempate para definir al nuevo campeón.
El primero fue un empate 2-2 y el segundo otro por 1-1 por lo que se tuvo que disputar una finalísima en la que el Decano venció por 3-2 y recuperó el honor de ser el mejor del país. Demás está decir que sus simpatizantes devolvieron las cargadas recibidas el año anterior, lo que iba generando paulatinamente un ascenso en la rivalidad entre ammbos.
Con lo sucedido en los dos años anteriores, el torneo de 1915 sumó mucha leña al fuego de la clásica rivalidad.
Esa temporada volvieron a terminar empatados en el primer lugar de la tabla de posiciones, esta vez con 12 puntos cada uno, lo que olbigó a partidos de desempate con un formato diferente al del año anterior.
Esta vez sería al mejor de dos partidos y si al cabo de los dos no había un ganador, el segundo juego sufriría un incremento de tiempo para definirlo. La primera final terminó 1 a 1 y la segunda 4 a 4, por lo que se jugó tiempo suplementario.
Fue en esos 30 minutos que Cerro Porteño adquiriría para siempre el mote de CICLÓN DE BARRIO OBRERO al marcar 3 goles más en ese lapso para quedarse con el partido por el global de 7-4 y también con su segundo título de campeón.
CICLON DE BARRIO OBRERO
La desazón en los olimpistas, como se los llamaba entonces, fue total. Los cerristas flotaban en el cielo deportivo con el orgullo en su máxima expresión, habían ganado 2 de los 3 campeonatos jugados y en el otro fueron finalistas.
Aprovechando la efervescencia existente entre los hinchas de ambos clubes, el domingo 27 de febrero de 1916 se organizó un partido amistoso entre ambos clubes en el Parque Caballero, que en esa época era lo que hoy el Defensores del Chaco, el field más concurrido del país.
El partido tuvo una concurrencia notable de personas y terminó con una goleada extraordinaria a favor de Olimpia por 10 a 1 con 3 goles de Carreras y Hermosilla, 2 de Varela y Rejala y descuento de Clemente Talavera. Es fácil imaginar lo que vino después entre ambas barras de simpatizantes, ese fue el punto de explosión de la máxima rivalidad entre ambos clubes. Marcó un declive en el rendimiento cerrista que en el campeonato de ese año (1916) quedó en 4° lugar con 12 puntos y Olimpia se alzaba con su 3° título de campeón con 22 puntos en una campaña espectacular.
Al año siguiente, el campeón volvió a ser Olimpia, pero como se decidió la unificación del título de campeón de las dos ligas existentes en esa época, la Liga Paraguaya de Futbol y la Liga Centenario, cuyo campeón era Libertad. El choque entre ambos campeones fue ganado por Libertad a Olimpia 1-0 en un partido que tuvo como hecho anecdótico la inauguración y el primer partido en el estadio de Sajonia (hoy De los Defensores del Chaco).
Cerro Porteño se coronó campeón de 1918 y consiguió su primer bi campeonato al ganar el de 1919. Los hechos acontecidos entre 1912 y 1919, entre el nacimiento del club Cerro Porteño (1912) y el cuarto título de esa institución, intercalados con otros 4 títulos de campeón de la Liga Paraguaya de Fútbol ganados por el club Olimpia cimentaron una rivalidad que trascendió ese siglo y llega fuertemente afianzada hasta nuestros días.
La historia nos cuenta que desde entonces la lucha por los títulos de campeón entre ambos fue casi excluyente todos los años. Desde 1913, esto es, desde que participan simultáneamente de los campeonatos, juntos suman el 71% de todos los títulos de campeón. Olimpia fue 38 veces (37 desde 1913) y Cerro Porteño 27.
Desde aquella tarde de julio de 1913 cuando debían jugar el primer clásico y por esas rarezas que entonces tenía nuestro fúbol el equipo de Olimpia perdió por incomparencia, incluyendo el de hoy 254 partidos oficiales válidos por el torneo local entre los clásicios rivales. Cerro Porteño ganó 90 de ellos, Olimpia dos menos, 88 y empataron 76 veces.
