El Ciclón pese al arbitro, de nuevo se encuentra con el triunfo. (20/11/2015)

En juego de regularización, correspondiente a la fecha 18, del clausura 2015, el Ciclón le gano a Sportivo Luqueño por 3 a 2. Jonathan Fabbro a los 11' y 88' y Junior Alonso, a los 29', marcaron los goles del Ciclón. Pasa y mira el resumen del encuentro.

En un partido cargado de polémicas, Cerro Porteño mantiene viva la ilusión del bicampeonato al derrotar por 3 a 2 a Sportivo Luqueño, en juego de regularización de la fecha 18, disputado en el Feliciano Cáceres.

El árbitro Antonio Arias embarró el espectáculo con una serie de errores en la toma de decisiones (todas contra Cerro), hasta que una genialidad de Jonathan Fabbro dejó al Ciclón con el sabor de la victoria, a dos puntos de la cima y más vivo que nunca.

Luego de tres partidos perdidos en forma consecutiva y con la urgencia de volver a la senda victoriosa para seguir en la lucha por el título, Cerro Porteño emergió del momento adverso por el que atravesaba para abrazarse de nuevo al triunfo al superar 3 a 2 a Sportivo Luqueño, en un juego que tuvo todos los condimentos polémicos posibles, en juego que dejó sin asteriscos este apasionante tramo final del torneo Clausura.

Y sí que fueron difíciles de obtener estos tres puntos para el elenco azulgrana, que tempranamente (11’) se ponía al frente con una definición muy técnica de parte de Jonathan Fabbro, quien aprovechó la presión y la cesión de José Ortigoza.

El local respondió en la medida esperada y a través de la velocidad de Derlis Alegre, Jorge Núñez y Marcelo Báez ponía en aprietos a una dubitativa y lenta zona defensiva, principalmente por el erróneo actuar de Víctor Hugo Mareco.

La paridad llegó luego de una pelota parada bien ejecutada por David Mendieta y aprovechada en el segundo palo por José Leguizamón (21’), el defensa goleador del Chanchón.

Cerro fue muy efectivo de cara al arco y sacó rédito de una salida en falso de la retaguardia auriazul para que Junior Alonso a los 29’ se vistiera de Ortigoza y definiera como un verdadero “9”, era el 2 a 1.

El segundo lapso dio paso a un sinfín de situaciones cargadas de emoción, tanto a nivel futbolístico como de polémicas arbitrales. Todo comenzó cuando Antonio Arias pitó como penal una supuesta infracción de Mareco sobre Núñez, luego se desdijo y al final apuntó el punto penal.

Arias desorientó a todos con su decisión. Esto caldeó los ánimos en los jugadores de ambos equipos. A Leguizamón (62’) no le importó mucho cómo se originó la sanción y sometió a Cristian Álvarez por segunda vez en el lance para establecer de vuelta la paridad en el marcador.

Jonathan Santana, de gran partido, caminaba sobre la cornisa, porque con una amarilla a cuestas seguía poniendo piernas fuertes que pudieron haber terminado en una roja, algo que el vestido de negro ignoró. Arias fue más protagonista todavía al anular un gol a Cerro, por otra supuesta infracción de Diego Lugano sobre el arquero Jorge Chena.

Sin embargo, el partido no terminaría solo con decisiones arbitrales claves por lo menos dudosas, sino que nos regalaría el poema hecho gol de parte de Fabbro, que puso magia a su pie derecho para una soberbia definición.

Cuando iban 88 minutos, Fabbro envió un remate al ángulo y evocó en más de un hincha azulgrana aquel gol ante Colo Colo por Copa Libertadores. Acerca de su anotación, dijo: “Era el único lugar donde podía entrar la pelota porque ellos se metieron muy atrás y había mucha gente tapando el arco”. Y decreto el 3 a 2 definitivo.

El volante azulgrana valoró el triunfo, pensando en la recta final del campeonato. “Se hizo un gran esfuerzo y ganamos ante un rival que está muy bien en el ámbito internacional. Contento por la victoria. Ahora nos quedan tres finales”, expresó.

Sobre la convocatoria a la Selección Paraguaya y su falta de minutos, señaló: “Es un orgullo estar en la selección. Estoy muy contento por estar en este grupo que, más que nada, está por buen camino”.

A pesar de la victoria del Ciclón, el presidente Azulgrana Juan José Zapag le pegó con todo al arbitraje y trató a Antonio Arias de “delincuente”. “Si quieren arreglar el campeonato que nos avisen y nos quedamos en nuestra casa”, disparó.

“Cerro Porteño no le ha ganado a Luqueño, le ha ganado a estos árbitros delincuentes que tratan de torcer el campeonato. Un penal regalado y un gol mal anulado, es una vergüenza.

Si quieren arreglar el campeonato que nos avisen y nos quedamos en nuestra casa”, se descargó el mandamás del Ciclón. Pero no se quedó solo en eso, Zapag acusó directamente a Antonio Arias de “delincuente”.

“Ya me han dicho que es un delincuente. Los árbitros deben de renunciar, están torciendo el campeonato. Por favor señor, su puesto profesional, delincuente el árbitro. Hoy le puedo decir que hay delincuentes. Gran triunfo porque ganamos a éstos réferes bandidos, delicuentes”, resaltó el presidente cerrista, bastante nervioso.

Roberto Torres le dedicó toda su conferencia de prensa al tema arbitraje. Para el “Tiburón”, el trabajo de Antonio Arias dejó muchas dudas y que se vengan repitiendo las polémicas en los partidos de Cerro le resulta muy extraño.

“Uno se siente impotente porque siempre el arbitraje va dando una chance a que hayas dudas”, señaló.

“Por eso me rio, porque la verdad que yo estuve lejos de la situación. Pero creo que hay mucha coincidencia porque las veces que a nuestro favor, por teléfono y todo llaman para ver si está bien; pero cuando es en contra ni se miran.

Yo no digo nada si es penal pero no puedo opinar mucho porque estuve lejos. En la del gol me pareció más falla del arquero que va a y propone.

Al cobrar esa jugada más bien fue una desesperación del portero que choca antes de que el jugador nuestro haga una falta”, comenzó diciendo Roberto Torres, que toda su conferencia de prensa se la dedicó al arbitraje.

“En esta situación donde se juegan cosas muy importantes uno empieza a desconfiar porque da la casualidad de que porque por ejemplo siempre pasa en nuestros partidos.

Yo sueño con jugar un partido bueno, que no haya problemas con el arbitraje, pero la verdad que uno se siente impotente porque siempre el arbitraje va dando una chance a que hayas dudas”, agregó.

“La verdad que a esta altura de su carrera yo ya no se más si es algo que sucede sin querer o es incapacidad. Lo que sí puedo decir es que ya me resulta raro que varios partidos nuestros que siempre hay problemas y eso lo que es raro.

Cuando el arbitraje no te da chances como que uno no puede ni protestar. La verdad que sorprende la actitud del arbitraje. Siempre están muy pendientes de nosotros y da mucha chance a que los jugadores y la afición empiece a hablar”, sostuvo.

Sobre lo que vio del equipo, “Tiburón” resaltó la actitud ante un rival que complicó bastante. “No hemos jugado como siempre queremos pero hoy se puso lo que se tenía que poner”, indicó.