Francisco Arce habló ante los jugadores después de conseguir el título con Cerro Porteño. La charla íntima fue muy emotiva en el vestuario de Dos Bocas.

Francisco Arce tomó la palabra en el vestuario para agradecer por el campeonato logrado por Cerro Porteño luego del empate a dos goles con Guaraní. El Chiqui agradeció al club, y en especial a sus jugadores que lo sostuvieron en momento tan complicado que vivió con el fallecimiento de su hijo Alex.

“El club hizo posible que yo estuviera de pie. Más que el club es el vestuario. (…) Me hacían recordar a mi hijo, hasta hubo algunos que un día me mandó un mensaje a las 5:00 de la mañana diciéndome ‘llegué a casa’”, señaló en el inicio de la charla.

A continuación, Chiqui se refirió a la definición del torneo en un partido que jugaba con 10 jugadores y perdía por dos goles de diferencia hasta el minuto 98.

“Al creer todo en un ser divino, no importa la religión, esto es un milagro, es para tomar como un milagro. Alguien nos tocó de arriba y habrá dicho ‘este grupo de personas merece’, porque ellos también hicieron mucho para conquistar”, apuntó.

“Desde el fondo de mi corazón los quiero mucho, mucho…De por sí Cerro toda la vida fue mi hogar, mi segundo hogar. Debo mucho al club, materialmente, como formación, como persona, no solamente como atleta, pero esto supera todo”, agregó.

Por último, el entrenador cerró su charla recordando a su hijo Alex, quien falleció en un accidente de tránsito en julio pasado. “Gracias a todos, al staff, a los directivos, a la hinchada, realmente ustedes hicieron posible que yo sobreviviera. Gracias por todo y para Alex”, sentenció.

Por ccp1912

Copyright ® 2022 Clubcerro.com | Todos los derechos reservados.