El entrenador azulgrana, Francisco Arce, reconoció que ante Colón de Santa Fe había que ganarlo como sea por jugar en casa, por lo que se mostró conforme con el partido que hizo Cerro Porteño, que terminó firmando una gran remontada ante en la Nueva Olla, por la fecha 2 del Grupo G de la Copa Libertadores 2022.
«Teníamos que dar nuestra mejor versión, porque era obligación ganar en casa, la Copa es muy corta en ese sentido, en esta etapa de clasificación. Es prácticamente una regla ganarlo jugando de local», afirmó en rueda de prensa.
«A partir de ahí y al estudiarlo un poco, necesitábamos jugarlo de esta manera porque tácticamente ellos son muy sólidos. Hubo momentos donde nos perdimos un poco, creo que un poco luego de que nos convirtieron, unos 5 minutos que tardamos en acomodarnos. Luego, en la mayor parte merecimos ganarlo», acotó.
En otro momento, «Chiqui» comentó en qué consistió la charla en el entretiempo por lo que los muchachos entraron mucho más enchufados en la parte final del encuentro.
«Que le imprimiéramos un poco de velocidad y precisión al pase. En el primer tiempo, en más de una oportunidad fuimos imprecisos pudiendo ser más peligrosos. Hablamos de que rematáramos más si era posible.
Que, si forzábamos un poco más, si estábamos más precisos, si exigíamos más al rival, íbamos a tener las chances como las tuvimos en el segundo tiempo», manifestó.
El estratega se refirió además a algunas críticas que saltaron en su contra por poner un equipo alternativo en Juan León Mallorquín, que terminó empatando sin goles y frenándose en el torneo Apertura 2022.
«Todos los que nos destrozaron la cabeza en Mallorquín hoy festejaron, esto es así. Todavía nosotros no estamos al nivel de los grandes clubes de Sudamérica en cuanto a los aparatos y el control para la recuperación rápida de los jugadores cuando tenemos un calendario de corrido», explicó.
«Chiqui» también apuntó a la exigencia que tiene en un equipo grande como Cerro Porteño, donde siempre se pide resultados sin importar el contexto.
«Aquí no se puede empatar y mucho menos perder, a nadie le importa las dificultades que existan, sean las lesiones u otras cuestiones que existen. Hay que ganar cada partido. El siguiente partido siempre es el más importante», sostuvo.
Por último, valoró la unidad y el cariño que existe en el grupo que maneja. «Esa unidad de cariño, porque es una relación muy buena la que existe en el plantel, es el valor agregado después de las cuestiones técnicos y tácticas en un partido», finalizó.